Estábamos tumbados en su cama, ella debajo de mí. Seguía besándola y ella me respondía con dulzura. Su pequeño cuerpo desnudo reaccionaba de manera muy seductora a mi contacto. Me deshice de mi camisa para sentir mejor su cuerpo, piel con piel. Los besos se volvieron más profundos y apasionados pero un sonido rompió el fantástico momento. Del bolsillo derecho salía una melodía que ___(tn) reconoció al instante:
- Liam, ¿Por qué tienes Boyfriend de Justin Bieber de tono de llamada? – Se tapó la boca con las manos para no reírse como una niña.
- No la tengo de tono de llamada de todos, es solo de Niall. Así se cuando quiere algo y me necesita. – Dije orgulloso de mi explicación. Le hice una señal con el dedo, para que no dijese nada. Y contesté.
- ¡Hola Niall! ¿Qué quieres? – Contesté lo más relajado posible, pero alguien me estaba acariciando el pecho y era imposible concentrarme con el joven cantante rubio.
- Liam, ¿Dónde estás? Acaba de llamarnos Paul para ir a firma discos. ¡VEN YA! – Dijo Harry, que según pensé le había cogido el móvil a Niall.
- Vale, vale. Diez minutos y estoy en casa. – Y colgué sin que Harry pudiera contestarme.
___(tn) me miraba con la cara entristecida por las palabras que le había dicho a Harry. La besé de nuevo en los labios y me levanté. Mientras estiraba un poco mi camisa para que recuperar la compostura, ___(tn) me miraba divertida:
- ¿Admirando las vistas, Sra. Smith? – Le pregunté con la misma diversión.
- Siempre es un placer admirarle, Sr. Payne. – Me contestó divertida.
- ___(tn), ¿Quieres venir conmigo a ver a los chicos? – Pregunté sin pensármelo dos veces.
Ella no contestó se quedo callada, envolviéndose en la toalla blanca del Heathman. Me acerqué a ella e hice que me mirara a los ojos, otra vez:
- Solo dime sí o no, ___(tn).
- No.
Y con esa simple palabra, mi mundo se derrumbó.
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